Monseñor Canecin presidió la fiesta patronal en honor de la Virgen de Las Mercedes

Monseñor Canecin presidió la fiesta patronal en honor de la Virgen de Las Mercedes

La ciudad de Mercedes, Corrientes celebró su fiesta patronal en honor de nuestra Señora y que da el nombre a esa ciudad. Monseñor Adolfo Canecin acompañó la solemne procesión que partió desde el templo parroquial y luego presidió la misa central, en la tarde del martes 24 de septiembre. Concelebraron el párroco Adolfo Gutierrez junto a los sacerdotes de la Diócesis de Goya. Acompañaron los presbíteros Diego Villalba y Luis Alberto Adis.-

El obispo comenzó su homilía, haciendo referencia a la oración que se presentó a Dios al comenzar la celebración: “Concédenos que podamos alcanzar y mantenernos en la verdadera libertad y que después podamos ofrecer a todos incansablemente” y señaló que “ahí comienza la verdadera actitud misionera, porque, las cosas de Dios siempre hay que ofrecer y proponer, con la mejor de las pedagogías y con mucha caridad, pero jamás imponer” reflexionó en su homilía.

Destacó luego que “Jesús dijo yo soy la verdad” y continuó el “Hijo de Dios, el hijo de María a quien hoy veneramos bajo la advocación de Las Mercedes, él es la verdad que no es fruto del mero consenso, sino que es una realidad objetiva que nos supera y nos trasciende a todos. La verdad es una persona divina, el Hijo eterno de Dios, que por gracia del Espíritu Santo, se hizo carne en las entrañas virginales y purísimas de María”.

Más adelante dijo que “bueno descubrir como pueblo mercedeño, el gran valor de la religiosidad popular, que es un lugar donde verdaderamente puedo encontrarme con Dios, es un lugar teológico que tiene que llegar a ser Cristo céntrico, centrada en Jesucristo, porque Él es la verdad que nos hace auténticamente libres”.

“Jesucristo nos da la verdadera libertad” y por eso “tenemos que pedir al Espíritu que nos dé sabiduría y revelación para conocerlo. Tenemos que agradecer el conocimiento que tenemos y en el cual estamos viviendo, pero no conformarnos con ese conocimiento”.

Ánimo a la feligresía a “caminar juntos para alcanzar la verdadera libertad que nos ofrece Jesucristo”.

“Siempre en la historia de la humanidad hubo diversos modos de cautiverio y de esclavitud. En nuestra sociedad actual, en este cambio epocal que nos toca vivir y en este cambio de civilización, que se viene anunciando, no estamos asomando a una nueva que es la cultura digital, que es una etapa preciosa de posibilidades pero también hay un montón de formas nuevas de esclavitudes que quieren quitar la vida y la libertad, quitar la plenitud de las vidas de las personas” remarcó.

Entre las esclavitudes que detallo el obispo dijo “La Trata de Personas es una esclavitud muy actual, ya sea en lo laboral, sexual y en los niños” y asevero con contundencia “hay gente que negocia con la Trata porque hay gente que consume” y también se refirió a “la esclavitud de la droga que creció inexorablemente, la esclavitud de la pobreza. Cuantas formas de esclavitud estamos viviendo y frente a todo esto tenemos que ser una Iglesia ministerial” concluyó. –